En el panorama actual de application security, la protección del lado del cliente se ha vuelto cada vez más vital. ¿Por qué? Porque los actores de amenazas han cambiado su enfoque hacia la ingeniería inversa del lado del cliente de las aplicaciones (web/móviles/de escritorio), aplicaciones a las que tienen acceso gratuito y sin restricciones. Las defensas tradicionales del lado del servidor no pueden safeproteja los datos confidenciales, la propiedad intelectual y el código que "vive" en las aplicaciones del lado del cliente.
La seguridad en la aplicación, también conocida como refuerzo de aplicaciones, aborda esta brecha mediante la implementación de medidas sólidas directamente dentro de la aplicación. El endurecimiento de aplicaciones incluye técnicas como la ofuscación de código para dificultar los esfuerzos de ingeniería inversa, mecanismos antimanipulación para detectar y análisis dinámicos, así como modificaciones no autorizadas, monitoreo de amenazas para proporcionar información en tiempo real sobre violaciones de seguridad y autoprotección de aplicaciones en tiempo de ejecución (RASP). para permitir que las aplicaciones se defiendan de forma autónoma contra amenazas activas.
Juntas, estas medidas forman una estrategia de defensa que mejora la postura de seguridad de las aplicaciones del lado del cliente, garantizando que sigan siendo resilientes frente a las amenazas cibernéticas en evolución. Si bien existen soluciones de código abierto y de refuerzo de aplicaciones de “tasa reducida” (y son mejores que ninguna seguridad), dejan grandes brechas en la postura de seguridad del lado del cliente y es mejor evitarlas.